Hoy más que nunca quiero escribir, hablar sobre mi libertad, aquella que me abandono cuando las estrellas nos observaron y decidieron utilizarnos, aquella que de rayas nos vistió y nos dio el rojo por color.
Hoy quiero escribir sobre la justicia, que con nombre de grupo me la quitan. Vestida de mujer es utilizada de pedestal para introducir palo tras palo, sin ninguna compasión violada por humanos.
Hoy quiero decir la verdad, la triste que me acompaña y me grita que la única salida es la muerte. La solución, más que dentro de mi esta en otro, o tal vez sólo quiera echársela a alguien que sepa más sobre escribir.
Hoy quiero escribir aunque sea lo último que haga, que sea la última acción coherente que realice en el día de mi liberación, lo único realmente apasionado que exista en mi mundo lleno de telas de araña, esas que han enmugrecido mi habitación.
Hoy quiero escribir sobre tu color, tu piel y tu pasión, más que de amor quiero hacerte saber, que cuando mi primera vez llegue, una estela de luz proveniente de tu vientre me acompañara a limpiar el cielo de estrellas y lo llenará de cegadores colores que me llevarán al éxtasis.
Hoy quiero escribir de aquello que me embarga el corazón, aquello que me atrapa y presiona el pecho: ladrones, periodistas, escritores, poetas, música, demagogos, políticos y falaces, hablar de todo para concluir que al escribir no logro nada. Escribir de todo para que al escribir los vuelva nada.
Hoy quiero seguir escribiendo, no parar hasta que la mano se entumezca, hasta que el cerebro quede exprimido de pensamientos, libre de prisiones y pudores. Escribir hasta lograr que mi cuerpo se deshaga, que el cuerpo se construya en uno y otro lugar al mismo tiempo, escribir para no parar. Para vivir y morir.
Hoy quiero escribir para decirte que la prisión ha llegado a su fin, que la castración se termino y han empezado a crecer nuevas flores en mi jardín; nuevos colores que invente en mi cerebro y ahora forman parte de tu nuevo mundo.
Hoy quiero escribir para liberarme, para liberarte, para decirte en estas tontas letras lo incoherente que soy, lo inútil y falta de talento que me he vuelto, pero al final escribir y ser como soy y quién se supone debo ser.
Poseída por esa necesidad de escribir me evoco a ti, me conjugo en tu pensamiento y me vuelvo tu piel porque la mía, hace mucho, entre líneas la dejé.
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